Proyecto Cultural

Los relatos sobre tradiciones, costumbres, personajes, mitos y leyendas expresadas en este texto, son el resultado de una investigación realizada en el ámbito geográfico de La comuna de La Higuera. Localidades como Caleta Los Hornos, Quebrada Honda, Chungungo, La Higuera, Los Choros, Punta de Choros, El Trapiche, Los Morros, y Punta Colorada, entregaron sus raíces campesinas, sus sueños y sus historias a este trabajo que pretende perpetuar el estilo de vida de nuestra gente, proyectándolas a la memoria histórico-cultural de las actuales y futuras generaciones.

La Comuna de La Higuera se encuentra ubicada a 62 kms. al norte de la Comuna de La Serena, posee una extensión de 4.100 Km2 y una población de 3.700 habitantes aprox. Fue creada en el año 1891, aunque figura en los libros con su instalación el 21 de Diciembre de 1892. Es reconocida históricamente como comuna minera y su pertinente auge se desarrolló entre los años 1855 y 1880. Esto motivó la llegada de numerosas familias; Sin embargo, la riqueza se agotó produciendo un gran impacto que incentivó el éxodo de la población.

Esta comuna de carácter rural, posee 11 poblados, distribuidos a lo largo y ancho de su territorio. Sus pobladores realizan diversas actividades tales como la pesca artesanal, ganadería caprina, cultivo de hortalizas y olivos, minería y hoy comienza a desarrollarse el turismo de intereses especiales.

El clima de la comuna es predominante semiárido cálido y se caracteriza por presentar baja pluviosidad en la estación invernal (junio – septiembre), y por la fuerte acción eólica en cuencas y quebradas en primavera (septiembre – diciembre); esta última condición ocurre preferentemente en el mes de septiembre.

La flora pertenece a la ecorregión de desierto, subregión ecológica del desierto costero la que se caracteriza por su adaptación a las duras condiciones de sequía imperantes.

La vegetación es xerofítica (cactáceas), y se caracteriza por la presencia mayoritaria de arbustos de baja altura y algunas especies de cactus en agregados dispersos, tales como la Tunilla, el Duro erizo, el Quisquito, el Chapín o Gatito, el Viejito. También se encuentran otras especies arbustivas tales como Palo Negro, el Churque o Vinagrillo, la Cola de Ratón, la Taisana y la Pata de Guanaco.

La comuna se caracteriza por presentar una fauna del tipo transición, es decir animales pertenecientes a la zona norte del país y de algunas especies de la zona central. Se puede distinguir dos tipos de divisiones en la distribución de la fauna; una específica del interior y otra de la zona costera.

En la del interior, podemos destacar la presencia de poblaciones de guanacos, loro tricahue, zorro culpeo, chinchillas, reptiles, liebres y roedores, entre otros. La mayoría de estas especies están protegidas por el Estado de Chile, ya que se encuentran catalogadas en vías de extinción. En la zona costera, podemos señalar la presencia de dos ecosistemas - marino y terrestre - que se caracterizan, el primero, por una gran productividad de mariscos (tales como: locos, lapas, jaibas, erizos, piures, caracoles, etc.) y mamíferos (delfines, lobos marinos y chungungos). En el segundo ecosistema, se pueden encontrar animales propios de la zona interior, como reptiles, zorros y guanacos; se debe agregar a éstos un pequeño marsupial llamado “yaca” (se establece que en Chile existen sólo dos tipos de éstos).

Producto de la relación y mezcla de los tipos de hombres que habitaron estas tierras y los hombres que llegaron a conquistarla, se entrelazaron costumbres, tradiciones, idiomas, religiones creencias y es aquí donde nacen nuestras raíces, adquiriendo su estructura vital, permaneciendo con vida en los crianceros, pirquineros, artesanos, payadores, curanderos, cantores, pescadores y todos los demás cultores de nuestro folklore. Los relatos e imágenes de nuestro trabajo fueron rescatados de la memoria de dichos personajes y autores, quienes nos confiaron la responsabilidad de expresarlas literariamente, salvaguardando la pureza de nuestra raíz.

Con el objetivo de permitir recuperar la memoria a este pueblo, que se gestó entre mares, cerros y quebradas, hombres y mujeres contaron sus historias a fin de proyectarlas al futuro con todos los valores que irradia su vida sencilla y humilde, viviendo en armonía con su universo natural.